lunes, 27 de diciembre de 2010

Una pastilla diaria...

La tarde del 24 de diciembre, como cada año, mientras que se iban haciendo los platos para la cena de Nochebuena, mi padre émpezó a llamar a los amigos de toda la vida, bueno, más bien amigas, porque lo eran más de mi madre que de él (o bueno, para quedar mejor, diré que son amistades de ambos).

A una de las que primero llamó fue a Mercedes, es de las que mejor me caen aunque la verdad, todos los amigos de mis padres siempre se han portado mucho mejor que los familiares. Es muy discreta pero sabe sacarte la sonrisa con facilidad, no nos hemos visto mucho, pero las pocas veces que hemos coincidido, me ha gustado.
Sé que desde hace algún tiempo lleva luchando contra un cáncer que si digo la verdad no sé de qué tipo es porque si me lo han llegado a decir, sólo me quedé con la primera palabra. Yo sé que es una persona fuerte, luchadora, positiva... pero la otra tarde mi padre me dejó algo preocupada cuando le pregunté qué como estaba y él me dijo que la notaba caída y que ahora le habían mandado una pastilla diaria de quimioterapia. "Eso no me gusta nada de nada" comentó mi padre y es que esas pastillitas en casa estuvieron y hay muy malos recuerdos.

Sólo espero que haya avanzado lo suficiente la ciencia desde hace 10 años para acá y poder llegar a pensar que esas pastillas tengan la función de matar al bicho malo y nada más.



1 comentario:

  1. Esos temas la verdad que no quiero entrar!!!!Solo te dire que la vida hay que vivirla como venga y cuanto mas se disfrute de la gente, de las vivencias, de las risas, de los buenos momoentos......eso es lo que a la larga te vas a llevar!!Yo aprendi a no callarme las cosas que siento porque quiza luego sea tarde ni hacer las cosas que sienta hacer por lo mismo!!!!La vida ya te trae adversidades por si sola por lo cual lo mejor es aprovechar los buenos momentos al maximo!!!!!Un besote Elena!!!Muaks mil y espero que tu Nochebuena se diera con un poquito de cambio de chip que te comente!!!muaksss Moni

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