miércoles, 22 de septiembre de 2010

Septiembre


-Este texto lo escribí a modo de reflexión el pasado día 12 de septiembre, sobre su explicación, ya la daré más adelante...-

El mes noveno del año llegó hace doce días, dejando atrás un inolvidable mes de agosto debido a las múltiples risas, buenos momentos, nuevas experiencias vividas que me han aportado mucho, que me han permitido conocer personas que ya forman parte de mi cuaderno de viaje veraniego...

Septiembre ha entrado en mi vida casi sin darme cuenta, debido a la felicidad y buena vibra acumulada, a los nervios por un gran evento que ha tenido lugar este fin de semana, pero ahora, sigilosa y traicioneramente, se acerca el día D, ese día que no consigo sacármelo de la cabeza y que tanto odio le tengo, entonces, me veo viajando como en una noria en la que, por más que intenté no querer bajar, ella se empeña y hace que, durante unos días no me sienta bien. El primer momento de bajeza, al despertarme esta mañana, echar la vista atrás a las últimas horas vividas, sentimientos totalmente encontrados en los que me había prometido no llorar por tristeza sino por alegría, trabajo muy difícil por el momento que se vivió, pero les había prometido a los dos que iba a ser valiente, decidida y cabezota y leer esas palabras que hace meses salieron de mi puño y letra y que tantas veces leí y releí, ensayando para tan importante día como era la boda de una de mis mejores mejores amigas. Trabajo hecho, asignatura pendiente: ese temblor que sentía al pronunciar cada una de las palabras ahí escritas.

Domingo tarde-noche, una ducha en la, mientras me intento quitar los kilos de laca del pelo empiezo a pensar en lo puta que es esta vida y que no nos deja disfrutar con plena alegría momentos tan felices e importantes de la vida como lo es una boda. Mientras cae el agua, lloro, esas lágrimas llenan de sentimientos tan dispares como alegría, tristeza, emoción, enfado y entonces, decido intentar parar de llorar porque, de qué sirve?? sólo yo sé por lo que lo hago, sólo yo me entiendo y no quiero que me vean con los ojos hinchados, nunca me ha gustado que me vean llorar...

Y septiembre debe seguir su curso, dar paso al otoño, seguir dejando vivencias y aprendizajes diarios y, a pesar de que vengan días malos, seguir con la sonrisa dibujada en la cara.

Bienvenidos de nuevo

Después de bastantes meses apartada del mundo bloggero por unas y otras cosas, vuelvo a la carga ya que much@s de los que me seguías en mi otro blog me pedías que volviese a escribir... he decidido crear este nuevo blog porque creo que estoy en otra etapa de mi vida, parecida a la anteior pero no igual, como dice una buena amiga mía, me he comprado un chubasquero que llevo puesto para que, ciertas cosas me resbalen más que antes...

Lo dicho, nos vemos de nuevo por aquí, todo un placer el regresar -:)