martes, 6 de diciembre de 2011

Frío

Hoy que ya es ayer, me levanté con sensación de un frío en particular, no porque la calefacción estuviera apagada, no por falta de colcha, edredón... era ese tipo de frío que sólo un abrazo puede quitar, sí, estoy muy falta de abrazos, raro en mí, nunca he sido muy de abrazar, bueno sí, a una en particular la abrazaba todos los días porque recibía a cambio lo mismo... Creo que según voy creciendo voy necesitando más afecto, cosa rara parece, habrá gente que piense que es algo normal y otros me tacharán de ¿inmadura?, ¿loca?, ¿caprichosa?, ...

Lo más parecido a un abrazo que tengo cerca es mi mantita azul, suave, fina y calentita, ¿qué mas puedo pedir? Una de las cosas por las que me gusta el frío es por esto, porque puedo arroparme y puedo imaginar esos abrazos nunca recibidos, esos abrazos que espero y espero y no llegan porque se perdieron por el camino o porque es tal la distancia que tardarán en llegar...

Salgo a la calle, hay una fuerte brisa, no es tan heladora como el año pasado, aun así sonrío porque detrás de ese escalofrío, vendrá ese sentimiento que mi subconsciente ha denominado "abrazo invisible" y me calmará el frío devolviéndome parte de calor perdido para seguir adelante como hasta ahora.

Hubo alguien que se atrevió a decirme que era unión perfecta entre el hielo y el calor... ¿será verdad? Yo misma me di cuenta de que llevaba razón. pero jamás se me habría pasado por la imaginación describirme de esa forma.

Y ahora, en este preciso momento, en cuanto baje la tapa del ordenador, me arroparé estremeciéndome abrazada a mi edredón con una sonrisa dulce pensando en que, dichos abrazos que anhelo, seguro que se harán realidad pronto... :)


miércoles, 19 de octubre de 2011

Noches sin dormir

... y con un cúmulo de sueño que roza lo inimaginable.


Me meto en mi cama con la idea de "esta noche sí voy a dormir, sí voy a descansar", no hay manera. Mi almohada, la que hasta hace poco era mi fiel compañera, mi guarda-lágrimas-en-secreto, se ha vuelto mi verdugo. No encuentro la forma de volver a ponerla a mi favor. Despertador, con su luz color esperanza, me desespera en las noches, veo pasar las horas y los minutos de una forma cruel...

¿Preocupaciones? Sí, algunas, pero no pueden ser resueltas a la voz de ya y menos a esas horas de la madrugada porque dependen en gran medida del factor suerte y esa en mí, tan pronto aparece como desaparece.

Sólo quiero dormir y descansar, dejar de ser un zombie que va a los sitios casi dando tumbos y que se queda frita en los lugares más insospechados....


jueves, 7 de julio de 2011

Un ciclo que termina

Sí, un ciclo que termina, dos años quedan atrás con mi tutoría, dos que en realidad son tres (contando el primer año que les dí ingles)



No han sido años fáciles, pero he aprendido tanto que vale la pena haber pasado por ello, ha habido momentos en los que, tras el timbre de salida he sentido tanta impotencia que me echaba a llorar intentando buscar una respuesta a la pregunta de por qué eran así, momentos en los que me pensé si seguir o estancarme, pero decidí seguir, costase lo que costase porque, al fin y al cabo, trabajo con niños, por mucho que quieran crecer y hacerse mayores para sus cosas sólo tienen 12 años.


El último día de clase fue muy emotivo, yo pensaba que no me iba a emocionar... falso!!! lo hice, entonces en ese momento la máscara de profe dura se desmoronó como un castillo de arena, "la profe" sacó a relucir su temida cara, esa que no quiere enseñar, la cara de la sensibilidad, la cara débil y frágil pero ese día, se permitía mostrarla. El momento cumbre fue cuando una de mis alumnas, la que peor me lo había hecho pasar el año pasado, me dio una cartita, agradeciéndome todo lo que había hecho por ella, sabía que en 5º, la convivencia no había sido buena. En ese momento, todos los malos ratos pasados, todas esas angustias que más de un día no me dejaron pegar ojo, valieron la pena, esta fue una de unas cuantas muestras de agradecimiento por parte de padres y madres y con eso me quedo, he conseguido, en la medida de lo posible, domar a estas "fierecillas" que afrontan un futuro con algo de temor por lo que les va a deparar cuando en septiembre vayan al instituto, llevan mis consejos, el principal es el de que ellos pueden porque saben, no hay ninguno tonto y si siguen el bueno camino no tendrán problema...


Y a mí me queda la esperanza que, esté donde esté el curso que viene, me lleguen noticias de ellos porque al final sí, si les voy a echar de menos...


El único límite para nuestra comprensión del mañana serán nuestras dudas del presente.
(Roosevelt)

sábado, 30 de abril de 2011

Adiós

Y ayer, después de meses volví a pasar por un sitio que me recordó a tí, tu imagen, borrosa y pasajera pasó como una ráfaga por mi mente, no tuve nudo en la garganta, no se me humedecieron los ojos, no temblaron mis piernas y eso en mí quiere decir que mi corazón te ha olvidado, que no significas nada, porque el daño fue más fuerte que todas esas muestras de ¿afecto? que recibí de tí. Me hizo pensar mientras atravesaba la Plaza de España de Madrid que por una vez en mi vida no sentí inseguridad, que no me siento mal por haberte olvidado porque todo el daño que me has hecho pesa más que todas las sonrisas que me hacias sacar sin que tú lo supieras.

Creo que no eras para mí, coincidimos en el mismo camino pero ya está, fue bueno mientras duró, no me arrepiento de haber sido yo misma, de haber desnudado mi interior para tí y lo mejor de todo es que he aprendido la lección aunque eso me haya costado ponerle una puerta blindada de hierro a mi corazón, me lo he ganado a pulso, me he jurado y perjurado a mí misma el no caer en la misma trampa de siempre, de momento la llevo a rajatabla, no más dolor añadido, no más lágrimas derramadas para nada, no más momentos desperdiciados esperando una señal que no llega. Voy a seguir andando mi camino de momento sola, apoyándome en las personas que de verdad valen la pena, esas que siempre tengo a mi lado, esas que me escuchan, que me han visto y oido llorar, las mismas que tantas veces me han dicho que me olvidara de tí y que no hice caso en su momento....

Y seguí caminando por la Gran Vía, disfrutando de esa gran avenida que tanto me gusta,mirando al frente, hacia delante, el paso que se ha dado ya no se volverá a dar con lo cual no queda otra que avanzar y por última vez volví a pensar en tí para desearte que la vida no te trate mal y que todo, te vaya lo mejor posible. ..............................................................................................................ADIÓS!!!



domingo, 13 de marzo de 2011

¿Tiene derecho a equivocarse un profesor?

Esta semana ha sido corta, dos días de fiesta y tres lectivos, no está mal (muchos los quisieran y no, no puedo quejarme de ello) Sin embargo estos tres días han sido un tanto horribilis" por culpa de unas cuantas alumnas, bueno, especifico, por culpa de una en concreto. Menos mal que no soy solo yo quien la nota bastante insoportable, entiendo que la edad del pavo hace estragos, pero eso no quita para que se tenga un mínimo de educación, el problema fue el siguiente: durante el fin de semana pasado me llevé a casa los exámenes de Conocimiento del Medio para corregir, pero entre estudiar para las oposiciones y airearme un poco (creo que tengo derecho a ventilarme) dejé aparcado para el final del puente los citados exámenes, era ya tarde cuando me puse y estaba loca por irme a dormir. Podía haberlos dejado y llevarlos a clase tal cual me los traje, pero ya estaba oyendo en mi cabeza el "profe,has corregio???", "profe, tienes los exámenes???", y un largo etcétera de preguntas del mismo tipo. Entonces, me preparé el bolígrafo rojo, calculadora y manos a la obra.

El miércoles, como era de esperar, no había entrado siquiera a clase que ya empezaron a reclamar los exámenes... los fui dando uno por uno, hasta llegar a la niña citada en cuestión (normalmente cabe citar que sólo miran la nota y los errores pasan de ellos, les da igual sabe en qué han fallado) que había sacado un 9,75. Al ver la nota fue rápido a ver dónde estaba el error, se fue a su sitio, seguí dando exámenes y cuando terminé uno de los niños me dijo, de forma tranquila: -profe, creo que te has equivocado al corregir, este apartado lo tenía bien y me lo has puesto como mal y mira, en el libro pone lo que yo había contestado... Entonces, me dí cuenta y asumí que me había equivocado, le subí el cuarto de punto que le correspondía y entonces como una fiera se acercó la niña y me soltó en toda mi cara... ¡¡¡¡tomaaaaaa, llevaba razón!!!! esa exclamación la soltó con mala leche, como diciendo, "joróbate que te has equivocado y yo llevaba razón". En ese momento no sabía dónde meterme y, del estado nervioso que me puso le dije que cuando ella no se equivocara nunca, me lo podría reprochar y se fue a su sitio con aires de grandeza.

Lo comenté con algunos compañeros del cole y me dijeron que ya habían tenido problemas con ella debido a su soberbia y prepotencia pero lo fuerte, llegó el viernes cuando, en la sesión de Matemáticas, la mandé salir a la pizarra y como tardó casi 20 minutos en hacer una división de dos cifras, la mandé a su sitio, tuve que aguantar su mirada desafiante y la mesa sufrió cómo tiró el libro con una mala leche que jamás he visto en un/a alumno/a.

En el recreo, se me ocurrió decirle que no me gustaba cómo se estaba comportando ultimmamente a lo que contestó: ya lo sé, pero me da igual...

¿Citar a la madre?, imposible, nunca acude a las reuniones, ya sean individuales o de grupo. Creo que, en dos años, la he visto una vez y vino porque hacía tres meses que la había citado y es que, como trabaja mucho, no puede venir a entrevistarse con el tutor o la tutora de turno. Conclusión que saco: me he comido el marrón y el mal trago y yo solita me lo digiero.

Desde aquí lanzo lapregunta o el tema de debate de si un profesor o profesora, tiene derecho a equivocarse alguna vez y, en caso de hacerlo, ¿qué castigo debe pagar?




domingo, 20 de febrero de 2011

Y el 14 de febrero pasó...

...y pasó sin pena y sin gloria porque era día laborable, porque es un día que no me gusta, es el día de San El Corte Inglés (como muchos otros días del calendario, véase día del Padre, día de la Madre, Navidades, Reyes, ...)


Vuelvo a reafirmarme cuando en Navidad comenté que parece que sólo en determinados momentos del año hay que ser buenos, generosos, quererse y amarse mucho,etc, etc, etc. ¿A quién queremos engañar? Hay gente que piensa que me amargo el día de San Valentín porque no tengo pareja y no es cierto, simplemente lo veo como un día en que se debería festejar en todo caso la amistad o el amor de forma global (puedo amar a mi gata pero no estoy enamorada de ella) porque se puede amar yo creo que, hasta a una piedra. Además me he propuesto fervientemente que jamás celebraré este día aunque tenga pareja y de hacerlo, por favor, que alguien me de un par de collejas y me ponga a leer esto.


En el colegio, las chicas de mi clase estaban dándome la matraca con este día desde que empezó febrero. Les dije que yo no iba a hacer nada porque se acordó que, de hacer algo, sería en el área de
Inglés asi que, yo lo haría con los enanos de 1ºB y mi compañera de Inglés, con los míos. Ella hizo una cadena de la amistad y yo un mural que está casi terminado, con corazonas y corazones vestidos de época (más chulis!!!) y les dejé bien claro que ese día era The Friendship's Day.

domingo, 23 de enero de 2011

Sueños que dañan






Vuelvo a tener miedo al escuchar determinadas canciones, tengo pánico de que vuelva a suceder después de un período bastante grande de ausencia, pero de nuevo esos sueños han vuelto a mí, se han apoderado de mi sensibilidad, de mi fragilidad dentro de la no-totalmente-conseguida fortaleza mía.

Son sueños que me hacen sentir culpable, son sueños que me dañan y me dejan sin aliento, son sueños que no quiero soñar, son sueños que no pueden calificarse como pesadillas, son sueños que jamás quisiera que se hicieran realidad y, mientras escribo esto, mi cabeza estalla en mil pedazos porque quiero pasar de ellos, borrarlos de mi mente, pero ahí siguen, clavándoseme como agujas incapaces de ser sacadas.

Quiero soñar sí, pero no soñar con esto...

miércoles, 5 de enero de 2011

Noche de ilusión, noche de magia.

"Tata, dame la mano hasta que me duerma, es que estoy muy nerviosa, ahhh y mañana cuando te levantes, llamamé eh?? Sí, tú tranquila, ahora duerme, que como te pillen  los Reyes Magos despierta van a pasar de largo. Vale, ya me duermo. Buenas noches. Buenas noches."

Durante algunos años, éste era el diálogo que mi hermana y yo teníamos la noche del 5 al 6 de enero, Al llevarnos casi ocho años, yo guardé muy bien el secreto, me encantaba ver los pequeños nervios que le entraban esa noche, cuando aún dormíamos juntas, cuando más fuerte me daba su manita y se quejaba cuando se la soltaba, me encantaba su inocencia y quizás la mía porque, a pesar de saber el gran enigma, esta noche es la que más me gusta por la ilusión y magia que se desprende. Cuando era hora de levantarse siempre me decía que mirara yo primero por si acaso no habían dejado nada,, se asomaba a la puerta y mis padres en la cama, haciéndose los dormidos, se levantaban seguidamente.

Hace unos cinco o seis años, cuando nos independizamos la una de la otra, pactábamos en que nos dábamos un toque para salir a la vez de las habitaciones e ir al salón a ver qué había caído ese año.

Sin embargo, para mi padre, cada año va perdiendo la ilusión de este día y a mi hermana, casi le pasa lo mismo. Sin embargo, yo sigo manteniendo esa ilusión, ese toque mágico y me gusta mantener el misterio hasta el último momento... de hecho, tengo mi habitación cerrada a cal y canto porque tengo que terminar de envolver alguna que otra cosa. Este año, creo que sorprenderé más al personal porque, a no ser que se estén haciendo los suecos... no tienen ni santa idea de lo que les espera (A mi padre una cafetera de esas monodosis para que vaya abandonando el cafe soluble asqueroso que toma; a mi hermana -que es la que más se lleva- una colonia, dos camisetas, una pulsera y unos pendientes; a mi tía, el último libro de Almudena Grandes y a mi abuela unos bombones.)

Ya os contaré qué me han traído a mí ;)


lunes, 3 de enero de 2011

Nochevieja de películas

Llevo unos cuantos años sin salir en Nochevieja, soy de la opinión que hay muchas noches en el año para salir y que ésta te sale realmente cara. Además soy la "solterona" del grupo y claro está, cada oveja quiere ir con su pareja, totalmente comprensible.

De tal modo, después de haberme tomado las uvas, de estar casi una hora y pico de charla familiar, me dispuse del reproductor de dvd, la tele, el sofá y la luz apagada. Me vi tres películas (lo que el cuerpo aguantó), una ya era repetida pero, me apetecía verla y fueron por este orden: La joya de la familia, El diablo viste de Prada y Love happens.

La segunda, llevaba ganas de verla sí, vale, es más vieja que la tos pero, o aprovecho estos momentos en los que estoy sola con un mano a mano con el salón, o se me fastidian los planes. La verdad es que me gustó, tiene un transfondo que te hace reflexionar y no es la típica payasada americana (por lo menos a mi gusto)

La tercera, bien porque me quedé sopa en unas cuantas ocasiones, bien porque no me he leído antes la sinopsis, no la entendí mucho; más que entender, presiento que no es lo que me esperaba en ese film. Sinceramente creo que la tendré que volver a ver cuando los párpados no me pesen de sobremanera.

El día 1 por la tarde, nos fuimos al cine a ver "Ahora los padres son ellos". Se nota que es tercera parte, te ríes pero, hubiera preferido pagar la entrada para ver otras dos películas estrenadas que tengo en mente y que me da, que me voy a quedar con las ganas porque ya el chollo de las vacaciones llega a su fin y este año supuestamente, hay oposiciones -:( y toca volver a clausura.

De todas formas, aún puedo chantajear a alguien para que me acompañe al menos, a ver la de "A 3 metros sobre el cielo"...

<<Aquí os dejo el trailer de "La joya de la familia", lo siento, no lo he encontrado en castellano.>>